El atleta amateur tenía varias maneras de enfrentar este año; ninguna fue equivocada, pero si diferentes:
El primero fue el atleta que, al no tener competiciones, decidió retirarse por completo de la actividad física. Este atleta deberá retomar desde un punto bajo tanto física como emocionalmente. Algunos de ellos probablemente necesitaban esta pausa, aunque abandonar seguramente fue drástico y en algún momento pagarán el precio de la reconstrucción.
El atleta que hizo la pausa obligada de competiciones, pero que aprovechó el año para trabajar aspectos, que por el poco tiempo disponible, a veces se descuidan. Ya sea trabajo de técnica, fuerza, potencia o velocidad.
El atleta que cambió de disciplina por necesidad. Nadadores que descubrieron que pueden incursionar en el triatlón. Corredores que conocieron los entrenadores ciclistas, o los ciclistas que salieron a correr a las calles. Cualquiera de ellos habrá ampliado su horizonte y, tal vez, habrá encontrado una nueva pasión.
El atleta que decidió participar en algunos eventos con los cuidados pertinentes. Es el atleta que se adaptó a lo que tenía a la mano para cumplir su meta.
El atleta que amplió su gimnasio en casa; complementó su equipo personal con un entrenador inteligente para bicicleta, unas ligas para trabajo de fuerza de natación o una caminadora para casa.
El atleta que siguió entrenando con el propósito de mantener la condición y estar preparado para el reinicio.
El atleta que se organizó sus propios eventos o el que lo hizo con su equipo. Fue el que le dio estructura a su entrenamiento como si fuera un año normal y siguió con una planeación específica.
Sin importar qué haya pasado, si estás leyendo esto es que sobreviviste a uno de los años más difíciles que ha visto el mundo contemporáneo. Como atleta, seguro fuiste responsable y diste el buen ejemplo para quienes te admiran y rodean. Si fuiste de los atletas que saben disfrutar del camino, y no solo de la meta, habrás encontrado la manera de dar continuidad a tu estilo de vida.
Ya solo nos queda desear que este virus deje de controlar nuestro entorno y podamos tomar control nosotros de él para volver a ser libres, responsables y, ojalá, habiendo aprendido la lección
Team Liv2Win les desea un año 2021 que les dé suficientes competiciones para compensar las ganas que se quedaron guardadas en el Año que Perdimos... o el Año que Ganamos.
